Actinopterygii
Cypriniformes
Cyprinidae
Ovípara, fecundación externa.
Omnívora. Prefiere alimento animal (insectos acuáticos, larvas de insectos, gusanos, moluscos…) pero también consume plantas acuáticas y terrestres, plantas acuáticas en descomposición, etc.
Hasta 30 años.
Es seguramente uno de los peces más extendidos por la acción del hombre. Está presente en más de sesenta países diferentes de los cinco continentes. Se dice que fue introducida en la mayor parte de Europa, desde una población procedente del Danubio, en tiempo de los romanos.
La carpa es un ciprínido de gran tamaño que a menudo supera los 70 cm de longitud. El cultivo intensivo, que se ha venido realizando desde tiempos inmemoriales, ha dado lugar al desarrollo de varias razas seleccionadas.
El desove tiene lugar hacia finales de la primavera o principios del verano, en zonas inundadas con escasa profundidad y vegetación abundante a la que se adhieren los huevos.
Gusta de destrozar las raíces y plantas, lo cual supone un grave problema para las poblaciones vegetales y tiene grandes consecuencias para otros seres vivos que necesitan esas plantas (anfibios, invertebrados, aves acuáticas…). Además compite con las especies autóctonas por el hábitat y el alimento.
La carpa común era un alimento de lujo durante el período del imperio romano. En esta época, los peces se mantenían en estanques de almacenamiento y más tarde en lagunas construidas por los monasterios cristianos teniendo lugar una selección artificial no intencionada, los primeros pasos hacia la domesticación. En China, llevan siendo criadas desde hace unos 2.000 años.
El crecimiento diario de una carpa puede llegar al 4% de su peso en piscifactorías.